Columna del sábado 24 de febrero de 2007
César Pérez Méndez
cperez@elquetzalteco.com.gt
VERITAS
En un día como hoy, hace 65 años, lo que se conocía como Asociación Deportiva Independiente de Xelajú, ADIX, adquiere el nombre de Xelajú que, además, como homenaje póstumo al destacado jugador, se le agrega Mario Camposeco.
El Club Social y Deportivo Xelajú MC tiene sobradas razones para celebrar, no únicamente es el significativo LXV aniversario, sino que pasan por un buen momento: son líderes del Clausura.
En medio de esa algarabía, ayer tuve la oportunidad de sentarme a desayunar con el plantel, cuerpo técnico y junta directiva del Club, (cita convocada por elQuetzalteco, como parte de la celebración) donde pude observar algunos aspectos que quiero compartir.
Un primer punto observado es la unidad, cordialidad y hasta familiaridad entre los jugadores, ambiente que no sólo debería quedar en compañerismo, sino que traducirlo en una fortaleza que podría aprovecharse perfectamente dentro del terreno de juego.
Una segunda acotación, en el que quisiera hacer énfasis, es en la presencia del semillero de los chivos; de verdad, que bueno ver a jóvenes de la Sub 17 y 20 formar parte del equipo. Como me comentaba el presidente del Club, el señor Francisco Santos, le están apostando a los muchachos promesas, porque saben de otras experiencias, donde la presencia de los novatos ha ofrecido buenos resultados. En esa línea, aunque a algunos les cueste admitirlo, los clubes mexicanos lo tienen claro, prestarle atención a sus semilleros les ha otorgado un nivel que hoy los sitúa donde están.
Santos dice que en todo esto, el técnico Carlos Daniel Jurado, juega un rol preponderante; mientras que otros no se arriesgan al ceder espacios a los más patojos, en Xela lo están haciendo. Más adelante se verán esos resultados que se han visto con los volantes Julio Estacuy, Gildardo Reyes, que viene del proceso.
Y una tercera anotación es la motivación del equipo a mantenerse como líderes, en ese orden, va por un buen resultado ante los cremas, el domingo.
Yo, humildemente, les diría que la motivación está bien, pero no es suficiente; los jugadores necesitan la convicción de que su ferviente afición se merece no un momento de alegría, sino que mantenerse: ese es el reto.
PUNTO FINAL. En el mes de su aniversario, elQuetzalteco nombró a jugadores, técnicos y directivos del Club Xelajú MC, Quetzaltecos de Corazón, como reconocimiento al trabajo que mantienen después de 65 años de establecimiento de la organización que mueve, agita y acelera miles de corazones que siempre están y seguirán ahí.
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