Criminólogo dice que el secreto para esclarecer un hecho es prestarle atención a los detalles

Luego de una serie de hechos de sangre de alto impacto, en los últimos días, en Quetzaltenango, Frente al Poder, decidió conocer una opinión calificada. Esta mañana por Siglo 104.7 FM conversé con el licenciado Emmanuel Rivera Gálvez, criminólogo y criminalista de carrera.
Antes de preguntarle cómo ve el panorama y qué recomienda, presenté a los oyentes una síntesis de los hechos recientes y que han llamado la atención de la mayoría:
- 14 de mayo. Matan a balazos al abogado quetzalteco Diven Ayerdi Fernández, en la puerta de su casa, en el Centro Histórico de Quetzaltenango.
- 28 de mayo. Asesinan al piloto César Estuardo Cifuentes Castañeda, de 24 años. Lo balean cuando conducía un bus urbano, en la zona uno de Xela.
- 7 de junio. Asesinan al agente fiscal del ministerio Público, licenciado Nicolás Rufino Velásquez Oroxom, también en la puerta de su casa. El atacante sólo hace un disparo mortal.
- 11 de junio. En la ruta de Xela a San Marcos, jurisdicción de San Mateo, balean una camioneta Tacaná, con saldo mortal. Muere el ayudante, Argero Calderón De León, y queda herido de bala, el piloto Marcos Rojop.
La situación no es normal ni nada que se le parezca. Al respecto, el entrevistado dijo enfáticamente que no se trata de hechos orquestados en una dirección, sino que son aislados. No tiene relación, pero deben ser investigados, opinó al referir que una premisa, como punto de partida en las investigaciones debe ser preguntarse: “¿Si queremos saber quién lo mató, veamos quién se benefició?”.
Rivera Gálvez dice que para llegar pronto a una hipótesis concreta, en el caso del fiscal Velásquez Oroxom, o cualquier hecho similar, los investigadores deben revisar las últimas 72 horas de la víctima; con quiénes habló, quiénes lo vieron y dónde estuvo. En los detalles está el éxito de la investigación, precisa el criminólogo.
Sobre las muertes de pilotos y ayudantes, el experto dice que no todo debe atribuírsele a las extorsiones, está también la competencia entre las empresas o venganzas personales. En estos casos, las investigaciones deben tomar, por lo menos, tres rutas.
Las extorsiones pueden tener dos orígenes, desde las cárceles y desde las calles, por la delincuencia común. La recomendación es que las personas sean reservadas con su información personal, porque muchas veces alguien muy cercano está involucrado.
Finalmente, Rivera Gálvez recomienda que en todo caso, hay que denunciar, porque es una pista legal para después perseguir a los delincuentes.
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Emmanuel Rivera Gálvez, es criminólogo y criminalista; Licenciado en Ciencias Criminológicas y Criminalísticas, por la Universidad Mariano Gálvez; y Master en Seguridad Pública, por la Universidad Galileo.