Por César Pérez Méndez
VERITAS
Dentro de dos semanas exactas estaremos viviendo el Sábado de Gloria, aunque aquí, en Quetzaltenango, y en el territorio nacional, la gloria se vivió con anticipación, gracias al futbol. Conste que gloria es sinónimo de encanto, satisfacción, deleite, gusto y agrado.
Los narradores del futbol tienen frases acordes, como: se hizo historia; pero los aficionados, van más allá con sus expresiones… desatan sus sentimientos de muchas maneras y es así como contagian a todos.
Desde el miércoles a las 10:30 de la noche, cuando Xelajú conquistó la Copa Centenario ; y media hora antes, la Selección Nacional conseguía ante Estados Unidos, su boleto al Mundial Sub 20, todos hablan de futbol y quienes no, andan en otro planeta.
Es la emoción o el puro contagio del triunfo de un equipo que se atribuyen todos, principalmente por ser hinchas o por razón de territorio. El jueves y ayer, no dejé de escuchar la palabra: ganamos.
Recuerdo un video que anda por el Internet y que dice: “estamos tan acostumbrados a no ganar nada, que cualquier triunfo que no es nuestro, nos los atribuimos, como cuando gana la Selección ”. Las imágenes y el texto los creó un mexicano, aclaro. Si le comparto esto, no es para quitarle la emoción, sino para que reflexionemos, porque no sólo de futbol vive el hombre.
El campeonato de Xelajú viene a ser una especie de calmante, lo mismo con la Sub 20, porque hace que se nos olvide lo importante; cada uno sabrá sus prioridades.
Pero es necesario, porque sin el futbol, cómo se quitarían el estrés esos miles de aficionados que acuden al estadio no sólo a gritar y cantar, sino que a proferir unos cuantos saludos en contra de los oponentes y árbitros.
Los verdaderos fanáticos no concebirían su vida sin futbol, porque los colores de su equipo corren por sus venas, como es el caso de los Superchivos: apasionados por naturaleza, es decir, por origen, por ser I-9, por haber nacido en esta tierra bendita de la Luna de Xelajú.
PUNTO FINAL. Tanto se merecen los aficionados quetzaltecos que, su periódico, elQuetzalteco, publicó ayer viernes una edición extraordinaria dedicada a la tercera Copa.