viernes, 24 de noviembre de 2006

Pasito duranguense bajo cero grados

Columna del sábado 25 de noviembre de 2006

César Pérez Méndez
cperez@elquetzalteco.com.gt
VERITAS

Al disponerme a escribir esta columna, un poco desvelado, inicio con mi conclusión de la presentación, en Xela, del grupo Montéz de Durango y Los Fugitivos, la cual la resumo en un trío de palabras: fue un éxito.
La impresión que se habrán llevado los organizadores del concierto que, terminó a las 0:20 horas de ayer, es que los quetzaltecos saben responder ante diversos gustos y géneros musicales del momento, claro, no era para dejar pasar “el pasito duranguense” que nos puso a mover el esqueleto; algunos, aunque no querían, resultaron sacudiéndose para menguar el impacto de las bajas temperaturas: tres grados bajo cero.
Por las acotaciones de las dos damas que alegremente me acompañaron en el concierto, supongo, presumo y deduzco (casi confirmo) que alguna que otra gente, es sólo apariencias. Ellas me demostraron lo contrario, no sólo corearon las canciones (no todas), sino que intentaron, porque eso es lo que hizo todo el público, seguir “el pasito duranguense”.
Saben qué, para algunos esa música es “naca” y/o “cholera”, pero como dijera otra buena amiga, ahora todo eso es simplemente “caquerísimo”. Vaya pues, sea como sea, es lo de menos, lo innegable es su ritmo prendido y contagioso; no en vano el Mario Camposeco fue abarrotado, desde la noche del jueves hasta la madrugada de ayer, según mis cálculos, por no menos de siete mil almas friolentas, pero acalorados por el ritmo traído de Chicago, EEUU, y México.
La calificación no es personal, al final, amigos, colegas y “el jefe”, o sea mi papá, y por supuesto, la de ojos claros y grandes, coinciden con lo excelente y cómodo del evento artístico que, sin duda, obligará más actividades de ese nivel. Para los incrédulos o para los que no asistieron y se quedaron con las ganas, échenle un vistazo a la página: http://grupomontezdedurango1.com/, a lo mejor me dan la razón o simplemente, cada uno sigue en su rollo.
Mientras que los quetzaltecos se ganaron el corazón de Los Fugitivos al corear, al unísono temas como: “Fue en un café”, “Si te vas”, entre otros, que en muchos removieron más que recuerdos.

PUNTO FINAL. ¡Qué orden! Para el ingreso del público; la fila acordonó las instalaciones de los “Superchivos” y los encargados del orden hicieron su trabajo, aunque a la hora de salir, las cosas se complicaron porque no se liberaron todas las salidas, lo cual desató el peligro, especialmente para niños y una que otra belleza embarazada que allí estaba.

No hay comentarios: