En 11 años no se ha avanzado a favor de ellas
Editorial
La principal arma contra la violencia, en sus distintas formas, contra las mujeres, es la denuncia, no sólo para evidenciarlo, sino para buscar los mecanismos que frenen al agresor; no es huyendo, mucho menos cubrirse con el manto del silencio como van a salir de este problema social prevaleciente en estos tiempos.
Hoy es un buen día para recordarlo, no sólo a las mujeres, sino que a todos los hombres, porque al final de cuentas no es un problema de ellas o ellos, sino de la sociedad en general. Cada 25 de noviembre, desde 1999, hace 11 años, se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, como una necesidad para alcanzar una sociedad más saludable en todos los sentidos, no sólo física, sino que hasta emocionalmente.
En estos 11 años, desde cuando se reconoció la necesidad de dedicar un día a reflexionar y hacer conciencia en la población, para frenar las agresiones, no se ha avanzado significativamente a favor de las féminas, porque el problema persiste, derivado principalmente de dos factores; primero, porque el Estado no ha asumido seriamente el compromiso de erradicar la violencia; y segundo, que a las nuevas generaciones no se les ha educado de manera que tomen conciencia para respetar y valorar a las mujeres.
Porque razón tiene quien en su momento expresó que las mujeres no eran nada más otros seres humanos, sino que eran las asistentes de Dios en la tierra para perpetuar la existencia del mismo hombre, en alusión a su valioso papel de madres.
Sin embargo, mucho podríamos seguir diciendo en este espacio, pero de no haber reacciones, es decir, cambio de actitud, quedamos en lo mismo. De ahí la importancia de traer a colación el aspecto de formación, tomando en cuenta que los comportamientos se heredan; en el caso de los agresores, revisando su historial, se encuentra que son personas que vienen de vivir en hogares donde prevaleció la violencia contra las mujeres o intrafamiliar. Por lo mismo, los padres de familia también deben revisar y hasta evaluar cómo se comportan ante sus hijos, porque sin pedírselo, ellos lo reflejarán en su vida futura.
El problema de la violencia contra las mujeres no es únicamente de ese sector, sino de todos, porque representa una represión y hasta freno para el pleno desarrollo social y hasta económico.
Ahora que pasamos revisión a la necesidad de combatir la violencia contra las féminas, recordamos la resolución 54/134,la Asamblea General de las Naciones Unidas, del 17 de diciembre de 1999, donde invitaban a los gobiernos, las organizaciones internacionales y las organizaciones no gubernamentales a que realicen actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública respecto al problema de la violencia contra la mujer. La fecha del 25 de noviembre fue designada como conmemoración del brutal asesinato, en 1960, de las tres hermanas Mirabal, activistas políticas de República Dominicana.
Hoy es un buen día para recordarlo, no sólo a las mujeres, sino que a todos los hombres, porque al final de cuentas no es un problema de ellas o ellos, sino de la sociedad en general. Cada 25 de noviembre, desde 1999, hace 11 años, se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, como una necesidad para alcanzar una sociedad más saludable en todos los sentidos, no sólo física, sino que hasta emocionalmente.
En estos 11 años, desde cuando se reconoció la necesidad de dedicar un día a reflexionar y hacer conciencia en la población, para frenar las agresiones, no se ha avanzado significativamente a favor de las féminas, porque el problema persiste, derivado principalmente de dos factores; primero, porque el Estado no ha asumido seriamente el compromiso de erradicar la violencia; y segundo, que a las nuevas generaciones no se les ha educado de manera que tomen conciencia para respetar y valorar a las mujeres.
Porque razón tiene quien en su momento expresó que las mujeres no eran nada más otros seres humanos, sino que eran las asistentes de Dios en la tierra para perpetuar la existencia del mismo hombre, en alusión a su valioso papel de madres.
Sin embargo, mucho podríamos seguir diciendo en este espacio, pero de no haber reacciones, es decir, cambio de actitud, quedamos en lo mismo. De ahí la importancia de traer a colación el aspecto de formación, tomando en cuenta que los comportamientos se heredan; en el caso de los agresores, revisando su historial, se encuentra que son personas que vienen de vivir en hogares donde prevaleció la violencia contra las mujeres o intrafamiliar. Por lo mismo, los padres de familia también deben revisar y hasta evaluar cómo se comportan ante sus hijos, porque sin pedírselo, ellos lo reflejarán en su vida futura.
El problema de la violencia contra las mujeres no es únicamente de ese sector, sino de todos, porque representa una represión y hasta freno para el pleno desarrollo social y hasta económico.
Ahora que pasamos revisión a la necesidad de combatir la violencia contra las féminas, recordamos la resolución 54/134,
2 comentarios:
Estimado Lic
exactamente comparto su ipiniòn al respecto la violencia contra la mujer pero igual los medios de comunicaciòn especialmente el periòdico debe jugar un papel importnate para ir disminuyendo la violencia en general; ya que normalmente lo que pùblica son temas de violencia y casi nada bueno en cuando a la edución misma que se les debe dar a los jovenes especialemente por lo tanto esto se debe revisar como una alternativa mas que se debe tomar en cuenta en la sociedad
felicitaciones igual me gustarìa que empezara hacer acciones mucho mas concretas con el apoyo de todo los sectores universitarios, organizaciones, autoridades y medio de comunicaciòn
Pieno que esta campaña por la No-violencia contra la mujer es de lo mas esteril, especialmente en un pais machista como Guatemala:
En una ocasion, un amigo se metio a defender a una muchacha que estaba siendo golpeada por el novio en la calle.
Este amigo empujo al hombre este y le dijo que porque no intentaba pegarle a el: La mujer le dijo a mi amigo
"No se meta, es mi novio"
No generalizo, hay casos en que las mujeres nos son tan tontitas, pero muchas si lo son. De quien salvamos a las mujeres que son abusadas si son tontas?
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