viernes, 22 de febrero de 2008

Lo que va pasar con Rodríguez Ovalle

Columna del sábado 23 de febrero de 2008

César Pérez Méndez
cperez@elquetzalteco.com.gt
VERITAS

Si algunos han creído que nada me parece –por mi posición frente al nombramiento del gobernador-, les aseguro que no es cierto, pues me alegra que un profesional quetzalteco tenga, en este momento, la posibilidad de convertirse en magistrado del Tribunal Supremo Electoral, TSE.
Entre los 180 expedientes que recibió la Comisión Postuladora iban dos originarios de Quetzaltenango, el licenciado Luis Felipe Díaz Pérez (no es mi familiar), presidente de la Junta Electoral Departamental, JED, en las últimas elecciones, y quien por más de dos décadas ha colaborado gratuitamente con el máximo tribunal electoral, y el licenciado Jorge Raúl Rodríguez Ovalle, quien además de abogado, es máster en administración pública, con estudios en derecho constitucional y experiencia en derechos humanos.
De las dos hojas de vida presentadas, dicha Comisión consideró oportuno presentar a Rodríguez Ovalle dentro de la lista de 40 aspirantes, para que sea el Congreso quien elija a los cinco magistrados titulares y cinco suplentes.
El tropiezo, a mi criterio, está en que serán los “honorables” diputados quienes elijan a los 10 nuevos magistrados que estarán en sus cargos por seis años, a partir del 20 de marzo próximo; estamos a menos de un mes.
Saben quién recibió los 40 expedientes, tal vez sí, porque lo dijeron los medios de comunicación; claro, fue el presidente del Legislativo, Eduardo Meyer; pero saben de dónde es Meyer, tal vez no; le cuento: es quetzalteco, pero radicado desde hace mucho en la capital. Aunque eso no incida en la elección –el origen-, se debería ver como ese tribunal queda integrado de una manera diversa.
Pero que va, si eso parece estar cocinado y los votos los han de estar pactando por bloques en el Congreso; que bueno sería si los siete diputados por el distrito de Quetzaltenango y dos por el Listado Nacional respaldaran a Rodríguez Ovalle, pero como eso no va a suceder, lo más probable es que este profesional quetzalteco no pase de su buena intensión de rescatar la credibilidad del TSE y de reformar la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
Y esto va a pasar porque el sistema actual lo permite, muy distinto sería si por cada región del país se designara a un magistrado, pero para que esto se concrete, hace falta más que voluntad política.

PUNTO FINAL. En teoría se dice que el TSE “es independiente y, por consiguiente, no supeditado a organismo alguno del Estado”; no lo creo, porque diputados eligen a los magistrados. ¿Usted qué cree?