sábado, 16 de junio de 2012

La felicidad

Columna publicada en elQuetzalteco, el sábado 16 de junio de 2012

Por César Pérez Méndez
D-Frente

Lo opuesto a la felicidad es la infelicidad. Sólo hay dos carriles, caminamos del lado de los contentos y felices o junto a los amargados e infelices.
Para ser más explicito, les quiero compartir lo que me describieron que es la infelicidad. Es la distancia entre lo que tengo y lo que deseo, pero desesperadamente.
Porque es válido desear y añorar cosas y situaciones, pero cuando eso no es controlado, nos volvemos desdichados.
Un amigo me dijo un día que generalmente no disfrutamos de lo que ya hemos logrado por estar pensado en lo que viene o sigue. La misma Biblia dice que no hay que afanarse.
Traigo a colación este tema porque ayer en el Centro Histórico de Xela se llevó a cabo el taller "Estrés y Felicidad", al que no tuve la oportunidad de asistir, pero previamente platiqué con el ponente, el psicólogo clínico Luis Aníbal Velásquez.
Uno de los retos actuales es caminar entre el estrés y la felicidad. Así que para comenzar, les confieso que me siento estresado y no creo ser el único.
Y no se asusten porque el estrés es una respuesta normal del organismo a muchas situaciones, derivadas especialmente de una vida dinámica. Si es permanente afecta, de lo contrario, es manejable. Así que este fin de semana, espantaré al estrés para disfrutar del Día del Padre.
Cada uno sabrá su ritmo, pero un indicador de que estamos estresados es cuando vamos manejando vehículo y notamos que llevamos las manos tensas en el timón.
El estrés nos interrumpe la felicidad. ¿Y qué es la felicidad?, porque sobre ella hay muchos mitos, dice Velásquez, como el sexo, la moda o el dinero para sentirse bien.
Qué quiere decir lo anterior, según el experto, que la verdadera felicidad no la definen los elementos externos; ni el dinero, porque sólo alegra mientras satisface las necesidades.
La felicidad es una interpretación personal, es cómo queremos vivir, porque además es una decisión. La felicidad no es el fin, sino el camino; es la búsqueda, por ello no se acaba ni agota.

PUNTO FINAL. El cerebro tiene la capacidad para ser feliz, está en cada uno. Sean felices. Seamos felices.