lunes, 13 de abril de 2009

Sólo uno en cada moto...

Por César Pérez Méndez

Mientras descansábamos, se publicó un acuerdo gubernativo que prohíbe que dos personas viajen en la misma motocicleta, una iniciativa del Gobierno guatemalteco para contrarrestar la delincuencia.
Y ahora que venía para la oficina, a una radio se comunicaba un vecino que manifestaba su inconformidad, porque decía que la iniciativa le afectaba directamente, pues le impedía ir a dejar a su esposa a su trabajo.
Creo que esta opinión o inconformidad tiene sobrada razón, porque más peligro va enfrentar su pareja al subir a un bus del transporte colectivo. Dicha disposición creo que fue una medida apresurada del Ejecutivo, porque el sicariato en moto no es tan común en todo el país; como en el caso de Quetzaltenango, es un tanto ilógico, si no vemos que los asesinos ataquen desde motos.
Además, para su fiel cumplimiento, primero tendrán que revisar la Ley de Tránsito.
Algo positivo es que el acuerdo gubernativo contempla el uso de un chaleco fluorescente y casco, ambos con el número de placa impreso. Esto me recuerda Colombia, donde todos portan estos distintivos, con la diferencia que allá, los sicarios sí andan en moto.
Con esta normativa... y yo que pensaba circular sobre dos ruedas, para ahorrar combustible.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pienso que la medida adoptada por el Congreso es un tanto apresurada como dice, pero es verdad que los asesinos a sueldo andan en motos, pero también a pié, en carro y otro tipo de transporte. Con ésta medida se viene a afectar a la población guatemalteca que por ahorrar tiempo y dinero viaja acompañado de esposa o hijos, pero como dice el dicho "justos pagan por pecadores", creo que mejor se debería tener un mejor control en la portación de armas y municiones y restringir de mejor manera el acceso a cualquier tipo de arma de fuego y evitar su contrabando y distribución anómala. Espero que esta Ley se modifique de tal manera que no nos afecte a los motociclistas, ya que ni a nuestras novias podremos subir, por temor a una multa o a que me la confundan con una Nikita. Hasta pronto.

JOSE LUIS VASQUEZ RAMIREZ